YELLOW L
El tema de INSOLIT de este año es la INQUIETUD.
La reflexión parte de dos modos de sentir inquietud. La primera desde el sentido de la vista, que como decía Chillida "la visión es el sentido más fuerte de todos". Y la segunda aproximación es desde el recorrido hacia lo desconocido mediante obstáculos que impiden al ojo saber que hay más allá.
Con esas dos premisas se ideó una instalación que invita a adentrarse en la sombra y descubrir. Geométricamente se resuelve en forma de "L", para no interferir en el funcionamiento del patio, pero que añade otro posible camino alternativo para las personas que trabajan en el edificio. Nace de la puerta principal del patio para desembocar en la puerta del Cal Marqués de la Torre.
En el interior, se crea una nueva atmósfera dorada, donde las sombras y la luz cambian, se matizan y surgen visiones y matices antes inexistentes. Se prioriza la oscuridad ante la luz, que se origina en la macla de los dos volúmenes, y que para llegar a ella se debe recorrer antes la oscuridad.
Por otro lado, la propuesta genera una volumen ligero que consigue dar sombra al patio. Durante el día, convierte el paseo en un espacio donde la sombra de la pérgola dibuja la forma en el suelo, convirtiendolo en un sorprendente umbral dorado.
El tema de INSOLIT de este año es la INQUIETUD.
La reflexión parte de dos modos de sentir inquietud. La primera desde el sentido de la vista, que como decía Chillida "la visión es el sentido más fuerte de todos". Y la segunda aproximación es desde el recorrido hacia lo desconocido mediante obstáculos que impiden al ojo saber que hay más allá.
Con esas dos premisas se ideó una instalación que invita a adentrarse en la sombra y descubrir. Geométricamente se resuelve en forma de "L", para no interferir en el funcionamiento del patio, pero que añade otro posible camino alternativo para las personas que trabajan en el edificio. Nace de la puerta principal del patio para desembocar en la puerta del Cal Marqués de la Torre.
En el interior, se crea una nueva atmósfera dorada, donde las sombras y la luz cambian, se matizan y surgen visiones y matices antes inexistentes. Se prioriza la oscuridad ante la luz, que se origina en la macla de los dos volúmenes, y que para llegar a ella se debe recorrer antes la oscuridad.
Por otro lado, la propuesta genera una volumen ligero que consigue dar sombra al patio. Durante el día, convierte el paseo en un espacio donde la sombra de la pérgola dibuja la forma en el suelo, convirtiendolo en un sorprendente umbral dorado.
Año: 2018
Situación: Palma de Mallorca
Tipo: arquitectura efímera
Cliente: concurso Insolit
Superficie: 65 m2
Equipo: Enrique Iriso, Jae-Young Lim Hwang y Marta Ávila Artigue
